Debo confesar que hace tiempo que pienso que soy algo visionario, en el sentido de que parece que mi pensamiento se adelanta, en ciertos casos, a los acontecimientos. Claro que a lo mejor es, simplemente, que me gusta estar informado, ‘percibo el rastro’ que va dejando la actualidad, y me adelanto a predecir por donde van a ir los tiros. O sea, resumiendo, que tengo una especial predisposición para proyectarme hacia el futuro.
Y la verdad es que, a lo largo de estos años, he ido soltado, en mi Blog, algunas ‘teorías’’ que estoy seguro de que se acabarán cumpliendo. Igualmente, en este ‘cuaderno de bitácora’ de la crisis del coronavirus, creo que me he adelantado, alguna vez, a cosas que luego fueron noticia, y no solo me refiero al ‘facciamo finta ché’, que se ha acabado convirtiendo en un ‘leitmotiv’ para Onda Cero, sino muchas cosas, con lo de los tests masivos, la crisis económica, etc, que, como decía, parece que se cuecen inconscientemente en mi cerebro, mientras duermo, y que a lo mejor alguna, a lo largo del día, le doy forma, al día siguiente la publico en el Blog… y luego empiezan a aparecer en la prensa.
No, fuera bromas, hasta a veces he tenido la sensación de que algún periodista importante lee mi blog y luego transcribe mis palabras a su columna o tertulia, que al leerla me parece un 'déjá vue'. O será que soy ‘pitoniso’, y ‘leo’ yo antes al periodista… que por supuesto tiene mucho más nivel que yo. O, y es una teoría que ya expliqué, no es más que una conexión al ‘magma’ común, espiritual, que nos rodea.
O, también es probable que sea que soy tonto, porque vaya tonterías que estoy escribiendo… ya que si fuesen ciertas tendría que estar ‘forrao’ con la bonoloto. Aunque todo se andará, claro, que esa si que es una premonición que ronda en mi cabeza, quizás bajo la influencia de un viejo, y sabio, consejo, aquel que dice que, si se pretende alcanzar una meta, siempre ‘hay que visualizar el éxito’.
Y de esto de predecir por donde van a ir los tiros es de lo que me apetece hablar hoy. Porque lo que está pasando en nuestra España del alma me tiene muy preocupado. Y es que que, como en una receta de cocina, ‘sobre un refrito’ de separatismo, antisistemas, comunistas bolivariano y una ‘chusma populachera’ antimonárquica y antisistema, se está cociendo un futuro muy poco claro. Y me da la sensación de que es una situación 'déjà vue'
Porque las llamadas ‘derechas’ (que el otro lado se identifica, y ya ha cuajado la idea, como ‘el trifachito’) están absolutamente anestesiadas o, mejor, atrapadas en una telaraña que, a partir del coronavirus, se ha creado, primero deshabilitando las Cortes Españolas, luego colocando los peones en el tablero del Poder Judicial y finalmente, en una maniobra ‘goebbeliana’, copando (el Gobierno actual) toda la actualidad informativa, exigiendo ‘lealtad’ cuando lo que quieren es un ‘seguidismo ciego’ a su creciente absolutismo (que, al parecer, le encanta a Sánchez y, por supuesto, a Iglesias), impulsando, además, una campaña de desprestigio por parte de los medios afines al Gobierno (todos los importantes) e incluso, como segunda oleada, ya empieza a aparecer el acoso con ataques personalizados, en las redes sociales, por parte de francotiradores ‘que se les ve el plumero’.
Y todo, como digo, dentro de una lucha durísima contra el virus… que impide a las derechas dar un puñetazo sobre la mesa, por aquello de cuidar el bien general, tener sentido de estado, etc, etc. … y miedo. ¿O prudencia...? Pero qué más da, el caso es que están calladitos. Y claro, en estas condiciones lo que más le interesa al gobierno… es seguir así.
Es más, vamos a suponer, y confiar, que este próximo fin de semana ya empiece a remitir la pandemia en Madrid, en Asturias y la Cornisa Cantábrica…). Y que en junio, incluso, hasta se pueda salir a tomar un gintonic. El ínclito Presidente del Gobierno, que lleva un tiempo astutamente ‘detrás de la sebe’, como decimos en Asturias, y por no hacer nada, ni habla con la oposición, maniobrará con sus socios en el gobierno, con sus medios afines para seguir en el poder.
Porque, veamos ¿A quien interesa un adelanto de las elecciones? A España, por supuesto que si. Pero está claro que no interesará ni al PSOE de Sánchez ni a ninguno de sus socios, que forman mayoría, porque ‘más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer’, sobre todo cuando lo ‘bueno’ (he dudado al poner ‘bueno’) es Pablo Casado, que me parece un buen chico pero que de líder… muy poco, o nada, y tras él ‘la derechona’, españolista y monárquica o sea, precisamente su antítesis. Porque, de momento, Ciudadanos 'ni está, ni se le espera'.
Así que, digamos, salvo que 'algo o alguien' lo remedie, nos van a quedar 3 años de legislatura inmersos en una gravísima crisis económica, gobernados por una pandilla de ineptos y ‘vendepatrias’… que solo se podrá resolver, o bien bajo la tutela, por quiebra del estado, de la Unión Europea, que parece la mejor solución (aunque realmente dura, y a saber si eficaz…) o bien con una de estas dos alternativas que, históricamente, se han dado en Europa:
a) Con un líder populista, y extremo, que se haga con el poder absoluto, y lo ejerza dictatorialmente… y en este caso ya dije yo, en mi Blog, cuando empezaba Podemos, que ojo con Pablo Iglesias, que tenía mucha semejanza con el comienzo de Adolf Hitler.
b) Con una España como la del 36, gobernada por un Frente Popular, donde Pedro Sánchez me recuerda al socialista (y radical) Largo Caballero, Pablo Casado podría ser un Gil Robles, Santiago Abascal, claramente, José Antonio Primo de Rivera, Torra, el Company de turno y auguro que hasta volvería Albert Rivera para ejercer de Alejandro Lerroux porque Arrimadas… se integraría en el PP.
Y a ver qué pasa.
Por tanto, lo dicho: si esto no es un ‘déjà vue’… que venga dios y lo vea…
(Iba a acabar, así de sombrío, esta entrada, pero mira por donde acabo de oir, en la TV regional, a un periodista especulando, como gran avance deportivo, sobre lo que tendrían que hacer los futbolistas al retomarse la competición… y me entró la risa. Porque decía, todo serio, que los jugadores tendrían que entrenar en pequeños grupos, y usar el gimnasio a distintas horas, que tendría que ser desinfectado en cada uso, se concentrarían, en el hotel (probablemente en varios) usando habitaciones individuales, se tendrían que desplazar a los partidos en autobuses con no más de 10-12 ocupantes, habría que desinfectar los equipos y los vestuarios…
Y yo me preguntaba si luego, durante el partido, tendrían también que marcar por zonas, al prohibírseles el marcaje ‘al hombre’, las faltas se tirarían sin barrera, no podrían ‘colgar el balón a la olla’... Y, sobre todo… ¿Qué harían en los córners?)
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