Floridos pensiles...

Esta curiosa (o cursi) frase que recuerdo haber oido, de joven, en mi casa, tiene, según veo en la Wikipedia, reminiscencias franquistas, e incluso es parte de una letra del himno nacional que corría por los años 50 (‘Fuiste de glorias/florido pensil/.’) pero yo la identifico con 'algo bonito que se desliza entre mis ideas (y ‘pensil’, según la RAE, es ‘algo pendiente, o colgado del aire’) produciéndote la placentera sensación de los buenos, o agradables, recuerdos'.

Amortales...

D ecía yo hace un tiempo, lucubrando a propósito de mi teoría del avatar, que mi criterio era el de que estábamos formados por la suma de un soporte físico, el cuerpo humano, y de un trasfondo espiritual, indestructible, y de origen, al menos para mi, 'positivamente inquietante', que yo llamo ‘el avatar’.
Y que las piezas que conformaban el soporte físico, como sucedía en Robocop, eran susceptibles de ser reparados, o reemplazados, manteniendo (incluso pudiendo llegar a perfeccionar) su funcionalidad.

Ministros y ministras

Ya había hablado alguna vez del asunto, a propósito de lo de ‘presidente y presidenta’, pero ahora, con el cambio de gobierno, se ha puesto de nuevo de moda esto que al parecer se llama ‘lenguaje inclusivo’ y que, más allá del ‘lenguaje paleto’ de aquello de lo de los ‘portavoces y portavozas’, intenta incluir el sexo femenino en todas las referencias a conjuntos de personas de ambos sexos.

Y, lo que es más curioso, la Real Academia Española, a pesar de la clara transgresión a la norma, ha bendecido esta opción… con gran cabreo de su académico Arturo Perez-Reverte, que se avergüenza, y lo dice públicamente, de ello.

Mataiotes mataiotetos...

kai panta mataiotes. O sea, ‘Vanidad de vanidades, y siempre vanidad’. Viendo lo que me gustan estas mariconadas léxicas, y considerándome, por mi habilidad con la mano izquierda, un zurdo convertido a diestro, pienso que también soy un estudiante convertido, y que tenía que haber hecho alguna carrera de humanidades… pero me convertí en ingeniero.
Pero empecé mencionando lo de la izquierda y la derecha… y a eso, y al aforismo inicial, voy a referirme.