kai panta mataiotes. O sea, ‘Vanidad de vanidades, y siempre vanidad’. Viendo lo que me gustan estas mariconadas léxicas, y considerándome, por mi habilidad con la mano izquierda, un zurdo convertido a diestro, pienso que también soy un estudiante convertido, y que tenía que haber hecho alguna carrera de humanidades… pero me convertí en ingeniero.
Pero empecé mencionando lo de la izquierda y la derecha… y a eso, y al aforismo inicial, voy a referirme.
Porque (y escribo ‘en caliente’) se ha llevado a cabo en España una moción de censura contra el PP de Mariano Rajoy… y se ha producido un cambio radical: el partido socialista, o mejor su secretario general, Pedro Sánchez, aliado con todas las fuerzas de la izquierda, y populistas, y con todos los golpistas-secesionistas catalanes, y con todos los vascos separatistas, han votado mayoritariamente un ‘gobierno Frankenstein’, porque se necesitó el acuerdo de 22 distintas corrientes de ideas, o partidos… y el ínclito Pedro es el nuevo Presidente del Gobierno.
Y no me cabe la menor duda: esto ha sido fruto, únicamente, de la ambición de este señor… que a ver donde nos mete, porque con solo 84 diputados su gobierno es inviable, y va a tener que pactar (o sea, ceder) TODO: soberanía, a los separatistas, políticas demagógicas, a los ‘perroflautas’, dinero (a espuertas) para comprar voluntades…Y, mucho me temo, devolver la radicalidad, el frentismo entre derechas e izquierdas... que parece ser que el equipo que le acompaña, en el PSOE, son de esa vía... en contra de otra, más templada, de los 'socialdemócratas' de su partido, que no le tragan.
Pero no voy a entrar en las razones alegadas para promover esta moción de censura 'express', ni en el detalle de su génesis, ni en el curriculum del tal Pedro Sanchez, pero qué fue, sino Vanidad de vanidades, aquel NO es NO, que bloqueó al pais durante cerca de un año (hasta que lo apartaron del mando el propio consejo rector del PSOE), su vuelta apoyándose en ‘la militancia’ (es decir, en los 200.000 socialistas más extremos… que ya dije en una ocasión que una cosa son los militantes… y otra los más de 10 millones de votantes que llegó a tener el PSOE), su sed de venganza, renovando ese Consejo, su ansia en alcanzar el poder ‘como sea’, sus prisas por ejercerlo (24 horas más tarde ya a tomado posesión y desalojado a Rajoy de la Moncloa, etc.) me hacer temer lo peor: puede ser, como Nerón, un vanidoso que incendie Roma.
Y, sobre todo, esperemos que esto no sea una reedición del tristemente célebre Frente Popular... ya que a estas alturas algunos todavía son felices dándole vueltas a la maldita Memoria Histórica.
¿Y Mariano Rajoy? Pues sigue igual, a mi me recuerda a Simeon el Estilita, subido a su columna, considerándose el más hábil, y el más listo del mundo, y despreciando todo lo demás. Vanidad de vanidades… que le ha hecho ser un ‘rara avis’ a quien todo el mundo califica como fino estratega, buen gobernante, muy buen parlamentario, enormemente inteligente… pero nadie quiere, por excesivamente timorato y parsimonioso en el gobierno… e incluso vago y pasota.
Y la sensación que da de ejercer de ‘padrino’, moviendo los hilos a su antojo, para hacer lo que le da la gana. O, al menos, con un muy visible (incluso en su gesto) complejo 'supremacista': la última, que se ausentó larguísimas horas de su propia moción de censura, como si no le interesase nada, una vez soltado su discurso. La escena de su escaño ocupado por un bolso, durante toda la tarde del acto, y su llegada, tarde, al día siguiente, ‘solo para despedirse y votar’ (eso si, de forma enormemente elegante), causó estupefacción.
Y, por supuesto, por haberse negado a presentar su dimisión, incluso hasta un instante antes de empezar la votación... lo que hubiera deshecho el proceso de la moción de censura (a su persona). Por todo ello, Rajoy da una enorme sensación de vanidad, de hacer solo lo que le parezca, sin importarle nadie más (ni sus votantes, claro, así fue su mandato… y por eso mucha gente le hemos ido abandonando: casi un tercio de los votantes del PP).
No voy a enrollarme entrando a valorar, también, las posturas de los nuevos partidos, Ciudadanos, y Podemos... e incluso del resto de los partidos participantes en el acto, aunque tengo claro que también les es aplicable, a sus cabecillas, lo dicho: que ‘...kai panta mataiotes’.
Y que dios nos coja confesaos… que a ver lo que nos espera con ‘Pedro Ambiciones’ y demás mariachis
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