miércoles, 8 de enero de 2025

Males estructurales

Por arrancar el año con suavidad, hoy me apetece hablar en ‘clave deportes’ y, una vez más, de los ‘panem et circenses’. O sea, de fútbol. Y, mas en concreto, de los males estructurales que, a mi juicio, en este primer cuatrimestre de la temporada 2024/25 están desluciendo el juego, y algún resultado, de ese prometedor Real Madrid de los Vinicius, Bellingham, Mbappé… o sea de los (teóricos) número 1º, 2º y 3º en la carrera por el Balón de Oro… (e incluso alguno más entre los ’top ten’) aunque luego se lo llevó (y menos mal…) otro español, Rodri… aunque jugando en el Manchester City del ‘Yusep’ Guardiola.

Empezaré recordando que soy seguidor del R. Madrid, así como del R. Oviedo y, por motivos personales, del Lealtad de Villaviciosa y del C.D Llanes. Pero seguidor, no forofo. Esto es, no me dejo llevar por la pasión y soy muy crítico cuando las cosas no salen bien. Además debo aclarar que, para mi, salir bien las cosas no es ganar por los pelos, o con suerte... sino que es ganar los partidos de 3-0 en adelante. O sea, sin ningún tipo de sufrimiento, que siempre he dicho que, ciertamente, el 1-0 abre el partido, y el 2-0 lo cierra… pero que solo debemos empezar a estar tranquilos a partir de que el 3-0 ‘eche el pestillo’. En asturiano… ‘echar el piesllu’.

Por eso, me considero sobre todo ‘merengue’: y porque, históricamente, el Madrid suele dar grandes alegrías a sus aficionados, incluido el protagonizar legendarias ‘remontadas’. Que la cosa, con el Oviedo, es más frustrante, porque la realidad es que sus seguidores no ganan para disgustos, con sus altibajos tanto de juego como de resultados… y los otros pobrecitos (el Llanes y el Lealtad) solo son, más bien, ‘equipos entrañables’, sin objetivos deportivos relevantes.

Y por eso, me duele enormemente ver cómo va el Madrid este año, y voy a expresar aquí mis teorías, adolece de ciertos males estructurales que lastran lo que debería ser una marcha triunfal... y que no tengo claro que sean capaces de resolver. Veámoslos...

El primero es que ha habido una pésima planificación.
Empecemos porque el Madrid, en los últimos años, suele alternar su pretemporada con unos ‘bolos’ económicamente muy rentables, para encarar un primer cuatrimestre de la temporada con la ‘puesta a punto’ retrasada. Pero esto es una opción estratégica, se prefería que la buena forma llegase en enero y febrero, porque antes los primeros meses solo significaban el comienzo de la Liga y de la fase de Grupos de la Champions, donde clasificarse para la fase final era bien sencillo, pues estaba estructurado en ocho grupos de cuatro equipos europeos, donde había que pelearse, normalmente, con un segunda línea y con otros dos, terceras o cuartas.

Pero esta año la Champions ha cambiado de esquema y en el nuevo formato hay un solo grupo de 36 equipos, jugándose la clasificación por cómo queden los 36 equipos tras el resultado de 8 partidos asignados por sorteo puro. Y hay que ‘atarse los machos’ porque como para clasificarse entre los ocho primeros (y pasar directamente a cuartos de final) posiblemente haya que ganar 6 de los 8 partidos, y para estar del 9º al 24º (que tendrían una eliminatoria adicional, de ‘octavos’) se supone que se necesitará no perder más de 3 partidos… un poco favorecedor sorteo te obliga a hacer un gran esfuerzo en este primer cuatrimestre.

Y resulta que al Madrid, este año, en la primera fase, el sorteo (¿Mano negra…?) ha decidido enfrentarle con ‘cocos’ como el Liverpool, el Burussia, el Atalanta (1º en el ‘scudetto’), el Milan, el Stuttgart..., además en agosto ha tenido que lidiar con dos finales importantes (el Chelsea y, para la Supercopa de Europa 24, con el propio Atalanta). Para colmo, en la liga española ha tenido tempraneros enfrentamientos con el Barça y el Atlético de Madrid.

Total, que lo que antes era un primer cuatrimestre más o menos tranquilo, donde se podía ir adquiriendo el tono físico para estar en forma hacia febrero, porque con la estructura histórica de la Champions (en 8 grupos de 4 equipos) estaba ‘chupado’… este año hubo que lidiar muchos morlacos.

Y si tienes que esforzarte bastante, y has atrasado (como dije) la ‘puesta a punto’… vendrán las lesiones. Que es lo que ha pasado, y el Madrid ha quedado absolutamente ‘en cuadro’, sin defensas, sin medio campo… y sufriendo para ganar los partidos… e incluso perdiendo impensablemente algunos. O sea, un caso de absoluta mala planificación. Y encima Pintus (Jefe de la Preparación física) y Ancelotti, como entrenador, tirándose los trastos y echándose mutuamente las culpas.

El segundo mal estructural es… el propio entrenador.
Yo creo que Ancelotti ya está pasadito. Cierto que, como ‘perro viejo’, es un buen gestor de vestuario… pero me temo que es un mal estratega. Vamos, que no tiene esquema de juego, y se limita a dejar que sus figuras jueguen ‘a su aire’, “que ya son lo suficientemente buenos para sacar adelante los partidos”… cuando está claro que no es así, que un equipo organizado puede taponarles las entradas (máxime si el juego natural de sus principales estrellas es ‘por la izquierda’) y, siendo cierto que el Madrid de las figuras puede ser letal al contraataque… yo lo veo ‘poco lúcido’ en el ataque estático que, en estos equipos, es el mas habitual. El ataque se vuelve individualista, para lucimiento de las figuras, y bastante peor, en este aspecto, que el Barça, que es más ‘coral’…

Y el tercer mal estructural es… el de no atreverse a sustituir a 'las vacas sagradas'.
Esto hace que jóvenes jugadores, muy prometedores, se aburran en el banquillo porque, si juegan, solo son unos pocos minutos (’los de la basura’). Y el caso es que, una vez que les alinearon ‘sin figuras’… hicieron un partido muy entretenido.

En resumen que no se yo cómo tratarán de resolver estos ‘males estructurales’ y, en el fondo, me da el pálpito de que este año el Madrid, a pesar de sus figuras, no lo va a pasar tan bien… De hecho gana (si gana) muchos partidos ‘por los pelos’, con ese punto de competitividad… ¿o ‘flor en el culo’?, que se le reconoce. Sin ir más lejos acaba de empezar el año ganando un partido que lo tenía 1-0 en contra en el minuto 86… ante un hundido Valencia.

Pero espero equivocarme, claro, que lo de aquel anuncio donde decían aquello de ”¿Y el Madrid, qué…? ¿Otra vez campeón de Europa…?” …marca impronta. Aunque (para terminar...) me mosquea un poco que Florentino haya adelantado a enero las elecciones previstas inicialmente para el mes de mayo, que es cuando se juegan las finales.

Así que toca esperar a mayo de 2025. Con fe merengona. Hombre, y si además el Oviedín pudiese iniciar su ‘Año del Centenario’ (que es en el 2026) en Primera División, ya… la de Dios...

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