sábado, 30 de mayo de 2020

Alarma coronavirus (VIII): FIN

Me hizo mucha gracia leer, hace unos días, que un crítico de cine, o un cineasta, no recuerdo bien, comentaba, sobre una película, que era tan mala que, en sus títulos finales, en vez de poner ‘FIN’ deberían haber puesto… ‘EN FIN…’
Y esto mismo voy decir de la película del coronavirus que nos están montando desde el gobierno, porque es tan poco serio que no merece la pena seguir más tiempo lucubrando sobre su desenlace, y voy a dejar de ocuparme de ello.

Porque la última es que, aparte de que cada semana dictan pautas de conducta ciudadana, y se desdicen de ellas, y que es cada vez más claro que asignan políticas de atenuación del confinamiento más por criterios de amiguismo (o enemistad) que por criterios técnicos, etc. etc... hace unos días ha saltado el escándalo al quitar, de un plumazo, casi 2000 muertos de las estadísticas de fallecimientos por coronavirus.

Y así, cuando oficialmente llevábamos más de 28.000, aunque otras cifras, como las deducidas, a través de los Registros Civiles, por el ‘diferencial’ de promedios de fallecimientos de estos últimos meses, hablan de más de 43.000, el ínclito Dr. Simón (a quien ya se le llama ‘el Félix Tezanos de Sanidad’) se sacó de la chistera que no, que en realidad solo son poco más de 26.000.

O sea, están cuadrando los números a patadas, para quedar ‘oficialmente’ como grandes gestores... mintiendo como bellacos, o considerándonos idiotas.

Ya en la última entrada de esta serie 'Alarma coronavirus...' incluía ‘mi’ estadistica de seguimiento de contagios, donde aparecía un escalón, para adecuarla a la trayectoria de Italia. Bueno, pues en mi estadistica ya aparece otro escalón, y esta vez en los fallecimientos… que, además, ya llevaban unas semanas, coincidente con el acercamiento a las fases de atenuación, con una curva claramente ‘forzada’, con pendiente menor que la italiana que, por la ley de los grandes números, ya parecía ‘poco natural’.

Así que no merece la pena perder el tiempo escuchándoles, la vida sigue, y es mejor olvidarse de las estadísticas oficiales.

Y en éstas estamos. Como noticias finales, decir que, después de casi tres meses y medio, al fin se ha declarado un ‘luto oficial’... y yo he podido descolgar la bandera con crespón negro que colgaba de mi balcón. Y, en mi Asturias, donde, como en Galicia, los test de seguimiento parece ser que demuestran que en virus apenas ha penetrado (lo cual puede ser, cara a la apertura de la temporada de verano, potencialmente peligroso…) yo ya he empezado a ir a la playa, e incluso me he dado algún baño.

Habrá que aprovechar ahora, que en julio y agosto, en mi playa favorita, el Sablón, de Llanes, de escasos 100x40 metros, y la ridícula norma de 1 sombrilla cada 4 metros (o sea, las sombrillas son más 'peligrosas' que las personas)… va a haber que ir ‘con cita previa’. Así que, los que podamos, si viene el buen tiempo, tendremos que adelantar el veraneo y aprovechar junio y la primera quincena de julio.

Pero acabo con otra noticia, ésta inquietante. Otro episodio que ensombrece aún mas el panorama que nos ofrece este gobierno: resulta que el Ministro del Interior acaba de cesar, fulminantemente, a un coronel de la guardia civil (nada menos que el Jefe de la Comandancia de Madrid)... por negarse, legalmente, a recabar y entregar al Gobierno informes de sus subordinados que actúen como policía judicial (es decir, a las ordenes únicas y directas de un Juez).

Y es que, en esas circunstancias, y por expresa orden de un Juez, investigaron si miembros del gobierno tuvieron perfecto conocimiento, antes del famoso 8-M de las grandes manifestaciones ideológicas feministas, de instrucciones concretas de la OMS sobre no permitir aglomeraciones (el 8-M), que obviaron… porque, de ser así, podrían ser imputados por omisión imprudente en causa de muertes, y desde luego por prevaricación. Lo que parece muy probable. 

Y, lo que parece seguro, es que este gobierno sigue actuando con unas ínfulas totalitarias que no auguran nada bueno, y debe haber un importante mar de fondo... porque a ese cese han seguido la dimisión/sustitución de los generales nº2 y n.º3 en el escalafón de mando de la Guardia Civil (porque, la nº1, la 'Directora de la Guardia Civil' es un cargo político, de designación por el gobierno.

Oido al parche. A ver en qué queda todo esto, que hay mucho nerviosismo y emmpiezan a escucharse acusaciones de golpistas, etc. 
Y yo acabo aquí mi serie de entradas sobre la alarma del coronavirus, con la triste sensación de que estamos en manos de unos políticos ineptos y, además, trileros, manipuladores y totalitarios… que a ver a dónde nos llevan.

Lo dicho: un preocupante EN FIN...

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