Il papa è morto...

Descendiente de emigrantes italianos llegados a Argentina, es, remedando la clásica ‘la mamma è morta’, la primera frase que me viene a la cabeza, tras desayunarnos, hoy mismo, con la noticia del fallecimiento de Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco. Y uno, que en esto del Blog va cogiendo ciertas ínfulas de reportero de la actualidad, no puede menos que ‘colar’, a vuelapluma, un artículo de opinión…

Por supuesto que, con 88 años, y en un largo proceso (del que se estaba recuperando muy lentamente) de fortísima neumonía bilateral, entraba en lo previsto… aunque la noticia, tras que ayer, domingo de Resurrección, impartiese su ‘urbi et orbi’, causa sorpresa. Así que, en el comienzo de esta Pascua (de Resurrección), entramos en fase de ‘Sede Vacante’… y empiezan las especulaciones de (aparte de las profecías de San Malaquías, Nostradamus, y estas historias) quien será el próximo Papa de la cristiandad católica, apostólica y romana.

Parece ser que la cuestión no se centrará en elegir un representante conservador, o progresista (o sea, al modo político, de izquierdas, como Bergoglio, tachado hasta de comunista, o de derechas, como el papa Ratzinger), sino en decidir (en conclave) quien es quien deba dar continuidad a la linea de pensamiento actual, o bien dar un cambio programático. O bien crear un ‘impasse’ temporal (o sea, elegir un papa algo viejecito) para ver con más calma por donde ‘tirar'.

Y es que la Iglesia, siempre ‘muy suya’, y tradicional, que se internacionalizó y modernizó con el viajero Papa Wojtyla y se elevó conceptualmente en sus mensajes con el Papa Ratzinger... desde 2013, con el Papa Francisco, dirigió sus prédicas a las capas sociales más bajas, ‘abriendo el mercado’. Y,ciertamente, haciendo uso de dejes ‘populistas’, con significativos guiños al anticlasismo, al cambio climático, al ecologismo... y hasta a los LGTBI y a la migración no regulada.

Vamos, muy en plan progreta de izquierdas… incluso algo woke. Y el resultado es que, según se dice, la Iglesia (‘católica, apostólica y romana’) está en pleno declive en Europa, de manera que más del 52% de sus fieles viven, ahora, en Iberoamérica. Y está creciendo el Asia y Africa, que son (según Bergoglio) su mercado futuro. De hecho, apenas viajó por Europa (y nada a España, al parecer no le caíamos bien), excepto visitas puntuales, o a zonas catastróficas.

Y, además (y aquí podría hablarse también de cierto ‘proselitismo’… muy de izquierdas), renovó casi todo el colegio cardenalicio, de manera que ahora 4 de cada 5 cardenales ‘electores en cónclave’ parece ser que los nombró él y presumiblemente 'serán de su cuerda’. Y muy pocos, por primera vez en la historia de la Iglesia, son italianos, hay mucho sudamericano, estadounidense… y africano y asiático, que superan claramente, en número, a los europeos.

Así que, lo dicho, estamos en ‘Sede Vacante’, quedan las negociaciones internas entre ‘los príncipes de la Iglesia’ y desde estos momentos la Iglesia está dirigida por el ‘camarlengo’ (o sea, el ‘chambelán’), que es el cardenal Farrell… irlandés que hizo su carrera eclesiástica en EE.UU. Y a ver qué pasa, porque últimamente el gobierno Trump (a través de su vicepresidente Vance) ha tenido importantes contactos con el Vaticano.

Mientras tanto, dejemos que descanse en paz Jorge Mario Bergoglio, ‘aka’ Francisco I. Curiosamente (o un adelanto de sus ideas) siendo el primer papa jesuita, prefirió llamarse Franciscus, el santo de los pobres y los humildes, y no Ignacius, su ‘alma mater’. Y, también curiosamente, fue el único cuyo idioma nativo fue el español… desde los Borgia (Calixto y Alejandro).

En fin, que como además a mi me caen muy bien los argentinos, y los italianos, y los jesuitas, con los que me eduqué y, aunque no soy progreta, me considero liberal, me gusta respetar las ideas de los demás y a las personas que aporten méritos suficientes. Y Francisco (como leo ahora mismo, en un titular) es claro que no será santo... ni tampoco fue especialmente sabio, pero por lo menos irrumpió con nuevos modos en el catolicismo y fuese, o no, como también se dice, comunista, deja un apreciable halo de sencilla humanidad y, como buen argentino, de viveza mental y sano humor.

Así que, con mi pésame, quedo, aparte de impresionado por la súbdita noticia (que por cierto me cogió en mis despertares matutinos, oyendo la radio por el ‘pinganillo’)… en espera de ‘la que se avecina’.

(Y confiemos en que su fallecimiento no sea otro augurio de que algo raro va a pasar porque ayer mismo, domingo de Resurrección, que se celebra el ‘Aberri eguna’, o día de la Patria vasca, en pleno 'akelarre' nacionalista propio de ese día, el presidente del ‘Euskadi Buru Batztar’ del PNV acabó su discurso… ¡Hablando en latín…, pidiendo ‘facta, non verba’...! Que debió sonar como los graznidos de las ocas, que decían los romanos que siempre presagiaban algo...

Y lo digo porque tengo la anécdota de que, en mis tiempos de consultor, el PNV nos encargó un estudio sobre el potencial del Santuario de Arantzazu, y su entorno, para poder atraer turismo, como pasa en Covadonga, Guadalupe (Cáceres) etc. A pie del santuario está el pueblo de Araoz, cuna de Lope de Aguirre… y lugar donde transcurre una calzada romana que se adentra por un túnel (artificial) para alcanzar la llanada alavesa… circunstancia que se me prohibió incluir en el informe ‘porque al País Vasco nunca llegaron los romanos’)