Sea lo que fuere (que yo ni quito ni pongo rey…) agarrémonos que vienen curvas, porque ahora, a principios de 2021, se reune en Davos la elite tecnológica (de las nuevas tecnologías), financiera (aunque sospecho que serán los mismos) y política del mundo, para tomar decisiones. Por cierto, se reunen… una vez descabalgado Donald Trump, que al parecer siempre se opuso a este ‘nuevo orden mundial’, para seguir dándole forma (e impulso) a este 'Gran Reinicio'.
El caso es que estamos ante una teoría rupturista y se ponen de moda términos como el ‘Build Back Better’, o sea el ‘reconstrúyelo mejor’, y otros nuevos ‘palabros’ como ‘resiliencia’, ‘sostenibilidad’ y cosas así que, bajo la presión de la pandemia del coronavirus, están cambiando la mentalidad (o las perspectivas) de la gente.
Porque… ¿En qué consiste el Gran Reset…? Pues, al parecer, en que la salida de la pandemia no sea un ‘levantarse y retomar la situación anterior’ sino un ‘borrón y cuenta nueva’. Hombre, en vieja frase que tantas veces menciono, ‘que ha llegado el momento de dejar de asfaltar los viejos caminos’.
Hasta aquí todo bien, es incluso imaginativo, y 'mola'… si no fuese porque las ideas de diseño de las nuevas carreteras son… muy rupturistas. Un célebre video del Foro Económico Mundial (o ‘Foro de Davos’) habla de que, para 2030, habrá una especie de ‘socializada globalización’, la demonización del capitalismo, y hasta del liberalismo económico, y prediciendo que…
La propiedad privada será mucho menos importante: cuanto menos tengas, serás más feliz, todo lo que quieras lo tendrás en renting, y todo servido ‘a la puerta de tu casa’
Se difuminarán los viejos paises dominantes: seremos un ente globalizado, conectado por internet.
Por el cambio climático, habrá que asumir, y acoger, grandes movimientos migratorios,
Estarán en entredicho los ‘valores occidentales’, por si hay que considerarlos obsoletos,
Tecnología al poder, por ejemplo no habrá donantes de órganos, todo se recreará con impresión 3D. Robotización. Busqueda de vida y recursos en otros planetas.
Cambio de pautas alimentarias. Dejaremos de sacrificar animales.
Pero claro… ¿Y quien manda? Pues ‘ellos’. O sea, el ‘Gran Hermano’. Porque detrás de este movimiento, al que se unen los ‘políticos progretas’ y aprovechan para meter baza (siendo, en general, consentidos) los colectivos feministas y los movimientos sociales de moda como los ecologistas, los LGTBI, los del Black Lives Matter, etc están… los de siempre: los administradores de las redes sociales.
Hasta el punto de que el Poder Público se está supeditando al Poder Privado. Los cargos públicos, o sea, los políticos, empiezan a ser unas marionetas. Bueno, verdaderamente, con honrosas excepciones, lo han sido desde tiempo inmemorial. Lo que pasa es que ahora se mueve muchísimo dinero, y los intereses y las ambiciones están desaforadas.
Mi admirado Jose Javier Esparza ha dado en la clave cuando habla del retorno del ‘nuevo poder feudal’ porque, ciertamente, la historia se repite y los nobles que, en la edad media, gobernaban ‘más o menos’ en la sombra reinos enteros, son los que ahora podemos reconocer como, por ejemplo, el duque de Facebook, el conde Twitter, el Señor de Microsoft, el barón de Apple y los marqueses de Google y de Soros. Por cierto, acabo de leer que Bill Gates es el mayor terrateniente estadounidense, propietario de cerca de 100.000 hectáreas en fincas de cultivo, que es una burrada de terrenos. O sea, como los Alba o los Medinacelli de nuesta vieja España.
Pues bien, este selecto grupo de ‘nobles’ es el que está queriendo dar el golpe de timón, hacer el Gran Reseteo, y gobernarnos de acuerdo con sus ideas. Solo que ahora ya no hay bosques de Sherwood, para plantar cara, todo se controla desde ‘la nube’, dirigiéndose las informaciones (y desinformaciones) a conveniencia, con la sensación claro de que estamos cada vez más bajo el control de un Gran Hermano.
Y, para terminar, quiero recordar mi entrada a este Blog de hace unos meses, a propósito de las enigmáticas portadas del Inquietante the Economist, donde se hablaba de quien y cuando inició el proceso de la pandemia.
La portada del Economist de este año en más monográfica… y muy sutil. Por cierto… ¿Significará, cada una de las tiras, un trimestre del año?. Ya se están empezando a ver, por internet, análisis de esta portada…
(también por cierto… me he descargado por Internet el PDF de este ejemplar, y son 412 páginas de interesantes análisis de cada parcela del mundo mundial).
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