En estas modas modernas, con sus ‘influencers’ y demás historias, se oye hablar de los ‘youtubers’ o sea, los ‘influencers que usan youtube para comunicarse’. Si uno busca, por Google, algo así como ‘lista de youtubers españoles’ posiblemente se te caiga el alma a los pies porque la pinta de los que aparecen en los ‘top 20’, o ‘top 100’… es (para mi gusto) espantosa. Vamos, de asomarte a ver de qué va la cosa… y no volver a entrar. Y es que todos o bien son 'gammers', o bien son, sencillamente, unos horteras o macarretas que quieren hacer gracias. Bueno, a lo mejor esto de los gustos es una cuestión generacional. Aunque la generación actual tiene unos gustos…
Hombre, como anécdota, el ‘youtuber’ más visitado, un tal ‘el Rubius’, que parece ser que gana un pastón con estas historias, se ha puesto de moda estos días por anunciar en su canal que se va a Andorra, porque ahí se tributa al 10% cuando aquí pasa del 50%… y evidentemente ha puesto en pie de guerra a la Hacienda Pública española, que poco menos que le han puesto espías, para tratar de cazarle.
Mi percepción sobre los youtubers 'top' es que, aparte de horteras, o macarretas, hay mucho ‘cabeza de chorlito’ (o mucho gilipollas, vamos) que no piensan que calladitos estarían mejor.
Pero en este mundo, tan de moda, que (debo reconocer) desconozco en profundidad y que parece ser de gente, en general joven, que, con su punto de exhibicionismo, les gusta publicar sus ‘creaciones’ en Youtube, intentan aplicar toda la parafernalia para aparentar ser originales, etc, etc…y piden que la gente les marque ‘likes’ para satisfacer su ego (y para mejorar el posicionamiento de su canal, que parece que hasta puede ser muy rentable)... a veces te encuentras con algún filón de oro.
Dije, en más de una ocasión, que no me avergüenzo por haber dejado de leer libros (veo mal, leo con excesiva ansiedad, me cansan…), porque entiendo que, hoy en día, la cultura entra mejor por medios audiovisuales. Por eso, desde que descubrí, hace unos meses, los videos sobre música de Jaime Altozano (que, por cierto, no está en esos ‘top’), estoy sensible al fenómeno ‘youtuber’.
Además he descubierto, para mi Debian, el agregador de noticias (feeds, o RSS) Liferea (‘Linux Feeds Reader’, supongo que habrá programas parecidos para Windows) que me permite ir agregando suscripciones a canales que me interesen y recibo y centralizo ahí las novedades recién publicadas. De esta forma recibo en mi 'central informativa Liferea' tanto las nuevas entradas de los blogs que leo habitualmente y los podcasts diarios de mis programas favoritos de radio como, ahora, las creaciones de una serie de ‘youtubers’ que cuentan periódicamente cosas que me parece interesante conocer, que he 'fichado', para mi ‘enriquecimiento cultural’, y que me llenan (junto con otras actividades audiovisuales) el hueco de ‘leer’ libros.
Y a día de hoy (porque es un campo enormemente amplio, y yo hasta hace muy poco, no lo había explorado) estoy suscrito a los canales de Youtube de...
Jaime Altozano, y su magnífico canal Todo sobre música, que tanto me ayudó para entender la música… e incluso a los clásicos, como puede verse en esta entrada (justo al final de la misma)
Sandra Ortonobes, una simpática ‘cerebrina’, posiblemente recién titulada en Biomedicina, que divulga cosas de este ámbito, de forma muy didáctica y bien documentada con videos y esquemas, en su canal La Hiperactina
Pedro Pérez, otro simpático profesor de historia (creo que es de Gijón) que en El cubil de Peter desarrolla pequeñas monografías sobre temas históricos, o culturales.
Pablo Barrecheguren, otro ‘cerebrín’ que está como una cabra (y además es baturrico, y ejerce), que explica temas curiosos de neurología en su canal Neurocosas
Un grupo (supongo…) de amantes de la historia, que en su canal Memorias de pez cuentan (con unas estupendas animaciones gráficas) pasajes de la historia del mundo y de la humanidad.
Alvaro Wasabi, un (creo) realizador de cine que, en su canal WasabiHumor, cuenta con mucha gracia los trucos y recursos que un experto detecta en las películas y series de TV más conocidas.
Ana Morales que, aunque me parece que le gusta demasiado ‘posar’ para un publirreportaje, habla de nanotecnología y sus aplicaciones, en su canal SizeMatters.
Bueno y etcétera, que, sin llegar a estar suscrito a su canal, muchas veces buscando algo, aparezco por Youtube, y encuentro gente que se dedican a explicarte ‘audiovisualmente’ cosas sobre muy diversos ámbitos, no se, informática, ciencia, reparación de ordenadores, música, por supuesto (para quien le guste) juegos… y te enganchan.
Por ejemplo, acabo de encontrar (y ‘fichar’, a ver qué dan de si) un par de canales ‘técnicos’. Uno es el de un joven divulgador, el físico manchego Jose Luis Crespo, importante youtuber, que en su canal QuantumFracture trata de explicar, de forma sencilla y didáctica, temas de física (del universo, cuántica, relatividad), astrología, matemáticas, o aclaraciones de mitos científicos...
Y el otro es el de un (también) joven arquitecto colombiano, Andrés Cervantes, que acaba de iniciar su canal Arqui.Cultura, con temas que parecen muy interesantes y documentados, como por ejemplo este sobre la Alhambra.
La pena es que últimamente se ha puesto de moda la inclusión de spots de publicidad, que te cortan el relato. Nada que criticar, si pienso que el (buen) trabajo que haga un youtuber, tiene que estar, de algún modo compensado (o, simplemente, financiado). Lo que pasa es que de vez en cuando te encuentras (aparte de los influences insoportables de los que hablaba al principio), con gente que quiere aprovecharse de la posible ‘monetarización’ de una participación en Youtube, y te meten publicidad en aportaciones de muy bajo nivel que claro, se les ve el plumero, y con cerrar su link, y buscar otra cosa… solucionado.
Y los youtubers 'populistas' que se meten en su bolsillo un pastón, si se van a Andorra para evadir impuestos… son muy dueños de hacerlo, claro, pero si les puede su exhibicionismo y lo cantan... pues hala, a crujirles. Por tontos.
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