Vinicius Jr.

Y a concluyó mi temporada de verano en Llanes e, iniciada la del fútbol, ya asisto – normalmente bien acompañado por un par de whiskitos (bueno, bourbon) - a los partidos de ‘mi’ Real Madrid en ‘mi’ centro social, el (café...) ‘Broadway’. Y ya empiezan a cruzarse apasionados comentarios en ‘la peña’, todos buenos amigos, y todos fieles seguidores del Real Madrid (y del Real Oviedo), a propósito de los lances del juego.
Como ya dije en alguna otra ocasión, yo no soy nada ‘forofo’, así que solo ejerzo de 'espectador ilusionado por que mi equipo gane’. Y, posiblemente por deformación profesional, me molesta (me desilusiona) ver imprecisión, fallos y errores en mi equipo. E incluso tengo fama de ejercer de ‘ultra del Tendido 7’, poniendo el dedo en la llaga, señalándolos.

Vamos que, bajo mi criterio, por muy buenas jugadas que hagas, si los disparos a puerta son muy defectuosos, o yerras en el último pase… incumples el objetivo, y no es cuestión de tirar cohetes ni aplaudir con las orejas, porque a efectos prácticos solo son ‘fuegos de artificio’, que no valen, ni producen, nada. Lo que vale es meter gol, incluso ir a ganar por tres, o más… que tampoco se trata de pasar sustos, o angustias, en el campo, viendo al equipo de tus amores. Yo voy... 'a disfrutar'.

Vinicius Xosé Paixao de Oliveira Junior es, junto con el franco-argelino Karim Mostafa Benzema, la rutilante actual estrella del Real Madrid. Pero he llegado a la conclusión (personal) de que puede peligrar su crecimiento futuro y, por más que se le tenga, en estos momentos, ‘en los altares’, temo que pueda no llegar a ser el prometedor ‘Balón de Oro’ que se espera. Vamos, que estoy viendo aparecer cosas (en el fondo, ‘vicios’) que no me gustan nada…
A ver... si, yo acepto (y aplaudo) sus dos principales virtudes: una, que seguramente es el jugador más desequilibrante del fútbol mundial y que, por ello, puede originar muchas ocasiones de gol.

Y otra, que tiene una buena ‘visión periférica’ y es generoso, así que le gusta pasar el balón (‘asistir’) al compañero mejor situado.

Incluso voy a añadir una tercera: que ha aprendido a defender y es bastante solidario, replegándose bien (y cubriendo su parcela) cuando atacan los otros.

Pero le veo dos grandes defectos: el primero, que es un rematador completamente errático. Vamos que falla lo infallable… y no parece ser que se lo estén corrigiendo. Así que , siendo el ‘number one’ en regate y desequilibrio, es del 100 en adelante en el lance (fundamental) de rematar a puerta. Y tengo tres teorías al respecto: la primera, que tiene la cabeza a pájaros, y es muy alocado. La segunda, que se ofusca, y remata ‘con los ojos cerrados’ (o en una ‘niebla mental transitoria’, vamos.

Y la tercera es que, sencillamente, no sabe chutar: es... ‘de pie blando’. Porque, así como los buenos porteros desvían balones ‘con mano dura’, los buenos chutadores poseen un ‘pie duro’, de donde salen unos tiros a puerta fuertes, y sin desvío. Bale, Asensio, Valverde… son buenos ejemplos en el propio Real Madrid. Pero Vinicius chuta ‘con el tobillo suelto’ y el balón va a cualquier parte… entre la portería y el banderín de córner.

Y su segundo gran defecto es que su cabeza no parece estar excesivamente bien amueblada. y él mismo se mete en líos.

Líos tanto por querer entrar regateando (para su lucimiento) por donde no debe, como líos protestando todas las faltas que le hacen, incluso echando, a veces, mucho teatro en sus acciones. Malo… Y últimamente ha dado una vuelta de tuerca más… donde no debe: que está creyéndose lo de ‘ser figura’… y a veces quiere adornarse en sus jugadas bastante más de lo aconsejable. O sea, se está viciando su juego...

Así que en el fondo pienso que este chico de 22 años, que proviene de un mundo humilde y necesitado, se puede ‘estropear’ si no digiere el cambio de vida y status. Y lo primero, para eso, es tener la cabeza bien asentada… cosa que, en su caso, no lo veo muy claro. Porque, además, le toca ya (‘ley de vida’) enfrentarse con una importante asignatura pendiente: que las estrellas suelen verse acompañadas por alguna despampanante WAG (de ‘Wives And Girlfriends’ que es como se llama a las deslumbrantes, y posiblemente caprichosas parejas de los futbolistas de moda…) y, al parecer, ya ha empezado a probar de ese fruto...

Hay un caso, en su equipo, del que tiene que tomar buena nota: del uruguayo Fede Valverde, que ahora tiene casi dos años más que Vinicius, y que ha trabajado con humildad hasta, este año, explotar definitivamente. Vamos que de ‘Pajarito’ ha pasado a ‘Halcón’. Y me alegro muchísimo por él porque, hace dos años, yo ya veía que ese chico iba para ser algo, y me encantaba verle jugar (cuando lo sacaban). Y actuando con humildad y seriedad (en esto los uruguayos son, ciertamente, mejor que los brasileños…) tiene su pareja estable (una guapa periodista, con la que tiene un hijo) y hoy en día es imprescindible en el Real Madrid. Y este si que es, además, un ‘pie duro’...

Así que (dejando a un lado al Real Oviedo, que de momento me ilusiona muy poco… y a ver donde nos lo llevan…) aquí está de nuevo ‘mi’ Madrid. Campeón de España, de Europa, del Mundo, Balón de Oro, Guante de Oro, con plantilla perfecta (aunque falte ‘gol’), muy bien trabajada, tácticamente, por su entrenador, Ancelotti (es un gran espectáculo ver lo bien que están posicionados en el campo, y cómo sacan el balón… aunque pequen en exceso de parsimoniosos), muy bien trabajada. igualmente, en el aspecto físico (por el afamado ‘Pintus’) lo que les permite, en los segundos tiempos, ‘tomar un segundo aire’ y llevarse, por fuerza, los partidos… con un ‘Ser Superior’, Florentino, dirigiendo su destino… y con un Superestadio.

Pero cuidadín con Vinicius, que a mi juicio, aún ilusionando, no acaba de afianzarse, y es que le puede faltar un hervor. Y sería una pena (por él) que se quedase por el camino… aunque aquí no pasaría nada, no creo que haya en el mundo ni un solo buen jugador que no quiera recalar en el Real Madrid. Otra cosa es que ‘se pongan a tiro’, claro...