La Comunicación No Verbal (II)

M etido en la temática del lenguaje de comunicación NO Verbal, y dentro del esquema temático que había decidido montar sobre este lenguaje corporal, hoy me toca hablar de los gestos de la cara (que no del ‘lenguaje de gestos’) y el ‘código secreto’ que transmiten, que son muy importantes ya que la mayoría de las veces estamos enfrente de nuestro interlocutor, mirándole a la cara. Y hay muchos aspectos: contacto visual, gestos de la cara, incluso tono de voz… que transmiten (o permiten vislumbrar…) ‘cosas’.

Y como primer ejemplo de 'esas cosas', vamos a hablar de lo que nos dicen los ojos:
El tamaño de las pupilas: a menudo el ver en nuestro interlocutor una disminución del tamaño en sus pupilas, nos puede llevar a colegir de ello una muestra de desagrado por lo que se está viendo (u oyendo). En cambio, el aumento de tamaño suele significar ilusión, o agrado.
El contacto visual prolongado: es interesante saber que, con frecuencia, un contacto visual prolongado, ese mirar largo tiempo a tus ojos, por parte de tu interlocutor, incluso sin pestañear, significa que intenta evitar ser descubierto en su mentira, ‘farol’ o falacia. Algo así como que intenta ‘dominarte’ con su mirada.
Mirar hacia los lados, por otra parte, suele tener connotaciones negativas, se identifica, habitualmente, con la falta de interés, incluso aburrimiento (o con la búsqueda de vías de escape).
Así que, en cuanto a la mirada, lo mejor es que no destaque. ‘Aurea mediocritas’, que decía Horacio (o sea… ‘en el término medio está la virtud’)

El tono y el volumen de voz son uno de los elementos más importantes dentro del lenguaje no verbal. Yo ya hice mis pinitos en el tema, hace unos 6 meses, en aquello de saber ‘persuadir con tu voz’, con el uso de la intensidad, y del tono y el timbre para transmitir mejor… y ahora quedaría añadir que conocer 'sus viceversas' (el desinterés, si percibes un volumen y un tono bajos, el nerviosismo (al hablar rápido con un volumen medio-alto), la sorpresa (al hablar alto y rápido, y acentuando mucho las palabras)... puede ser interesante). Aparte de los típicos y conocidos tonos e intensidades que transmiten tristeza, alegría, o confianza (cuando se habla con un tono alto, decidido, y velocidad media)

Risas y sonrisas:
Reírse contigo significa identificación e interés en lo que dices. De ahí el viejo consejo, a conferenciantes, de introducir, lo más rápidamente posible, una frase graciosa o un chiste... para palpar (o testar) el ambiente.
Las sonrisas falsas: pero hay que tener cuidado con las ‘sonrisas falsas’. Con una risa, o sonrisa, verdadera te salen arrugas en las zonas cercanas a los ojos. Pero en las sonrisas falsas no se generan estas arrugas que, al parecer, ‘vienen de dentro’. Va a haber que llevarse una lupa…

La cabeza es, asimismo, una buena fuente de información:
Una cabeza alta (erguida) y una mandíbula 'que ves que se echa para adelante' es signo de agresividad y de afianzamiento en un postura, o tesis, que considera ‘poderosa’.
Una mandíbula cerrada, unida a un cuello tenso y un ceño fruncido es un conjunto de gestos típico de transmitir no verbalmente la disconformidad con cómo se está desarrollando la conversación, o los hechos.
Asentir con la cabeza es otro gesto subconsciente (y que se puede tratar de inducir, o contagiar) que transmite interés, y acuerdo. O sea, que estamos en niveles positivos. Pero cuidado porque si el gesto se realiza varias veces y a gran velocidad suele significar no querer escuchar más, que podría derivar en ‘hartura’.
En este mismo entorno, hay que añadir, finalmente, que si cuando se hace una pregunta (por ejemplo, la típica ‘pregunta de control’), se contesta de inmediato (o ‘con gran inmediatez’), es muy probable que nuestro interlocutor mienta, pues cuando respondemos 'la verdad' solemos meditar o intentar estructurar convenientemente lo que vamos a decir.

Y bien, como veo que aún queda materia, lo dejo aquí por hoy. Próximamente hablaré (bueno… escribiré mis 'pinceladas conceptuales’) sobre la información que se comunica a través de piernas y pies, y sobre el lenguaje no verbal que transmiten las posturas del cuerpo, con lo que acabaré mis 'apuntes' sobre comunicación no verbal, ordenados en razón al elemento que lo produce (las manos, los gestos de la cara, las posturas corporales…)

Pero, sobre la marcha, he visto otro enfoque interesante, la agrupación de los elementos de lenguaje no verbal en razón a la percepción o el sentimiento que generan… así que ya estoy pensando en un ‘Apéndice’.
Al tiempo...