Cada vez 'hablo' (o sea escribo aquí, y etiqueto) menos sobre ‘Política y Sociedad', y eso que parece un tema bastante ‘vivo’. O al menos, esa es mi sensación. Y yo no se si es
por hastío, o por pereza, o lo es por desear mirar para otro lado. Además esto me sucede en estos dos primeros meses del año, meses crudos que paso mayoritariamente en casa (quizás como la marmota Phil) donde, al tener más tiempo disponible, suelo ser bastante prolífico en el Blog. A lo mejor es porque prefiero estar también ‘mentalmente encuevado’ y pensar solo en cosas ligeras, o genéricas, o de humor, para empezar relajadamente el año. O es, simple y llanamente, por cuestión de edad, claro...
Pero hete aquí que por estas fechas (semana arriba, semana abajo) se van a cumplir tres significativos aniversarios, y (como, además, ya han pasado la Candelaria, y San Blas…) he pensado que sería bueno empezar a desentumecer un poco ‘mi pensamiento político’.
Porque, efectivamente, hace unos 5 años empezó lo del famoso COVID, hace 3 lo de la invasión a Ucrania (la segunda, y actual, Rusia ya se había anexionado, años antes, la península de Crimea)… y hace 1 año explotó ‘el caso Koldo’, que luego evolucionó en el escándalo sistémico actualmente latente.
Lo del COVID (‘la’ covid, como acabamos diciendo), que empezó por febrero aunque en España se silenció para no tener que impedir la 'manifa' feminista del 8 de marzo (y sus contagios ‘en cascada’), se saldó, se dice pronto, con 130.000 españoles oficialmente fallecidos. Fue, ese episodio, un enorme laboratorio de manipulación de la sociedad, el germen de multitud de experiencias personales (no entraré en ello)… y el surgimiento de gente que se aprovechó enormemente de la situación.
Hace unos días aparecieron por un programa de televisión (en la Sexta, claro) una buena pareja, aquel tal Fernando Simón, que nos mentía y manipulaba a diario por TV (‘hay solo unos pocos casos’, ‘el comité de expertos dice que…’ y ni eran tan pocos casos ni existió, nunca, ese mencionado comité de expertos) y el tal Salvador Illa, hoy 'president de la Generalitat', nombrado entonces ministro-coordinador de Sanidad… y responsable de oscuros grandes negocios con el tema de los equipos de protección, las mascarillas, etc.. (y las prohibiciones de acceder ‘por libre’ a la obtención de esos recursos vitales)
Pues bien, estos ínclitos, cinco años más tarde, nos siguen queriendo imponer ‘su relato’, echar la culpa al PP y a Ayuso, etc, etc. Y todo para defender, y seguir apoyando fielmente (supongo que para mantener su propio cocido) al máximo beneficiario de la situación sobrevenida, el no menos ínclito Pedro Sánchez, que es este periodo de pandemia cimentó su dictadura al gobernar a placer ‘con las sesiones de las Cortes suspendidas y con los españoles encerrados’.
Pasando a la guerra de Ucrania, de Zelenski, Putin y compañía, siempre estuve muy harto. Porque, lo dije desde el principio, eso se tenía que haber resuelto (pactado) en tres meses. Como también dije que, para mi, la culpa no fue entera de Putin, que lo que él quería era abortar el que Ucrania perteneciese a la UE, porque con ello la OTAN se establecía en Ucrania, y la región del Dombás, al Este (lo que ha invadido y anexionado ahora) conformaría una amenazadora pinza para Moscú, porque resulta que están más al Este que el propio meridiano que pasa por la capital de Rusia.
Ahora, a la administración Biden, que fomentaba el asunto, la sucede la ‘administración Trump’ que ha puesto la mesa patas arriba, y empieza diciendo que Europa se defienda sola (o sea, que se olviden de la OTAN, que volvería ‘al Atlántico Norte’)… y sigue diciendo que todos los conflictos los van a resolver entre Putin y él. O sea, deja fuera de la mesa de pacificación al propio Zelenski… y a la propia comunidad europea. Y todo el mundo sospecha lo mismo: que si se va a hablar de ti y no estás en la mesa… es que estás en la carta (del menú).
Además, Trump (en boca del vicepresidente Vance) ya les leyó la cartilla (y muy a fondo, y en Bruselas) a los políticos (burócratas) europeos diciéndoles, en resumidas cuentas, por un lado que ya basta de esperar a que los EE.UU les saquen las castañas del fuego y, por otro, que solo hay una democracia y unos valores democráticos, y que no intenten crear y mantener una democracia hecha ‘a su modo y manera’, sino que deben hacer caso, de una vez, a lo que, en verdad, les pide su pueblo.
Y me imagino que a Zelenski, en cuando le vea, ya que su actual petición es que ‘pues si se retira EE.UU, que se cree un gran ejercito europeo para seguir defendiendo a Ucrania’… le va a decir que ‘mira Volodomir, déjate de tonterías, dale menos al vodka, y se realista, que ya estamos hartos de tus bravuconadas’. Así que a ver qué pasa.
Y finalmente, estos días también se cumple el primer aniversario de la aparición del caso Koldo... y Abalos... y las ‘escort’ a sueldo del Ministerio… y que tirando de la manta del comisionista Aldama se empieza a ver que lo que parecía una golfería se convierte, como decía antes, en un caso de ‘corrupción sistémica’ que involucra a la práctica totalidad del PSOE. Mejor dicho, a la práctica totalidad del grupo de amiguetes que apoya al PSOE de Pedro Sánchez, a varios ministros, al Fiscal General, a la mujer y el hermano del Presidente, a colaboradores en distintos ministerios, a tramas internacionales con ZP en primer plano… y en la doble vertiente de, por un lado, ‘forrarse’ personalmente con mordidas y comisiones y, por otro, defender a ultranza la ‘pseudo-democracia’ en la que estamos metidos, este estado dictatorial y enormemente gastizo creado para sostener en el poder, a mayor gloria personal, al sátrapa Pedro Sánchez, a base de ‘comprar’ votos, opiniones, líneas editoriales, dictámenes legales... y ‘amarrar’ al poder legislativo (las Cortes) y hasta al judicial, baldarnos a impuestos, etc..
El lío es tan tremendo, con enfrentamientos entre altos poderes judiciales, cada vez mayor malestar en la calle, y hay tanta lentitud, y obstaculización, en sacar adelante todas las evidencias, y que caiga quien caiga… que a ver en qué queda todo esto… que lo estamos sufriendo todos.
Y ya acabo… con un pensamiento final: con el Papa (88 años) bastante malito, y los políticos europeos (y, entre los más gallitos, nuestro ínclito Pedro Sánchez) queriendo echarle un pulso a su hasta ahora socio EE.UU… (y a Rusia, y a China...) yo no hago más que acordarme de que, hace muchos años, me interesé por Nostradamus. y sus centurias y cuartetas (Les Prophéties).
Porque creo recordar que algo se ‘insinuaba’ de que, a la muerte del último Papa (y todos pensamos, incluido San Malaquías, que este jesuita ( el ‘papa negro’) va a ser el último papa de la Iglesia), salían victoriosos los agarenos, Francia quedaba destruida (y con ella el imperio carolingio, o sea, Europa). Y que en esos episodios tendría singular papel el ‘rey de España’.
No se, algún día tendré que revisar qué hay de claro en este viejo tema de Nostradamus… que, verdaderamente, no deja de ser muy inquietante. Porque lo que si es claro es que andamos metidos en esos contextos...
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