lunes, 22 de abril de 2024

Sakoneko bonba

Esto del título quiere decir, en vasco, y si los diccionarios de Google no son muy malos, ‘bomba (o carga) de profundidad’. Y es el ‘titular’ que me pide el cuerpo ‘a bote pronto’, o sea, ‘bat batean’ (de repente) o bien ‘pentsatu gabe’ (sin pensar), para definir los resultados de las elecciones autonómicas 2024 del País Vasco que transcurrieron ayer, 21 de abril… y que seguí con atención... a pesar de que, simultáneamente, se jugaba un R. Madrid-Barça.

Y el título surge porque, pensando en los resultados de estas elecciones al Parlamente Vasco, me viene a la mente la típica imagen de las películas de submarinos donde siempre aparecen los lanzamientos de esos artilugios, las 'cargas de profundidad', que van bajando, apacible y silenciosamente, por el agua, hasta que, de pronto, pegan un petardazo que ‘funde los plomos’… y empieza la acción final.

Comenzaré poniendo los resultados en términos generales (esto es, la composición del Parlamento Vasco), solo a falta de añadir el efecto del voto CERA (Censo Electoral de Residentes Ausentes), que se escruta el día 26 y que, al parecer, son unos 8.200 votos (a repartir entre las 3 circunscripciones, parece ser que unos 3.700 para Vizcaya, 3.500 para Guipúzcoa y 1000 para Alava) que no se cree que cambie (si cambia...) mucho las cosas (la mayoría requiere alcanzar los 38 escaños)
Y ha pasado esto…

Se puede apreciar que ha habido cambios (y ‘no cambios’, las sumas, en %, son muy parejas) bastante significativos… pero que todo va a seguir igual, en un ambiente de fuerzas políticas que seguirán siendo ‘pastoreadas’ por Pedro Sánchez, que podrá seguir contentando a todos (de momento impunemente, y a costa de los impuestos a las ‘mayorías silenciosas’).

Porque, veamos...
a) PNV, habiendo perdido bastante peso, aún tiene, con el apoyo del PSOE, la mayoría suficiente para seguir gobernando en el País Vasco… como lo ha venido haciendo desde siempre. Así que están contentos porque pueden continuar, todavía, sin que nadie ‘les levante las alfombras’. Y el PSOE, apoyándoles, se asegura el apoyo del PNV en Madrid.

b) BILDU ha alcanzado todos sus objetivos: sus votos son imprescindibles en Madrid, y puede seguir obteniendo de Sánchez todo lo que quiera (de momento blanqueo de presos, Navarra…) Y además, ahora representa, en el Parlamento Vasco, una mayoría de izquierdas que no solo puede frenar al PNV sino que, si fuese el caso, podría pactar, con Sánchez, el poder gobernar. Y así Sánchez puede, incluso, chantajear al PNV (y, jugando bien las cartas, hasta a Bildu…)

c) El sanchismo sigue siendo un superviviente-resiliente nato. Vamos, que siempre sale ‘flotando’. Porque, aparte de lo dicho, y a pesar del mal cartel que tiene, a nivel nacional, la bronca a su izquierda, entre Podemos y Sumar le permite nutrirse de votantes ‘de su cuerda’ de izquierda y, así, taponar las mermas que tenga ‘por el lado social-demócrata’.

d) La derecha española sigue sin tener enmienda posible. El único enemigo del PP parece ser VOX. Y VOX ya no es lo que era, y ahora se está convirtiendo en una secta de salvapatrias. Lo malo es que ambos (el centroderecha y la derecha-derecha) son necesarios. Pero el PP no acaba de crear un discurso ilusionante, que (ahora) tendría que captar ‘españoles’ liberales y de centro-izquierda. Yo creo que fallan las personas, Rajoy moldeó un partido conformista y acomodaticio, y Núñez Feijoo, que también es gallego, hace muy poco por renovarlo.
Pensar que, en otros tiempos, el PP (de Mayor Oreja, de María San Gil…) llegó a tener 19 diputados en el País Vasco y ahora solo tienen 7 (y, con el de VOX, 8)...

e) Y por cerrar el espectro, hablemos de los 'podemitas' y de los 'yolandistas' de SUMAR.  O sea, de la izquierda extrema nacional. Nada, a desaparecer, sus ideologías son caducas, sus líderes son de pésimo nivel cultural, y su argumentario, pura demagogia. Hombre, claro que (una poquita de...) gente de esa extrema izquierda siempre tienen que existir, pero en el País Vasco se han ido (casi todos) a BILDU que, al parecer, es donde se encuentran más a gusto los antisistema...

Así que todo va a seguir igual, pero con un PSOE de Pedro Sánchez que ha salido muy reforzado de este envite (recordemos el palo que se pego en Galicia)… pero que, a su vez, sigue estando muy necesitado de los votos de los nacionalistas, que de esta forma seguirán teniendo barra libre para obtener, para su territorio, sustanciales mejoras económicas… y legales.

Y, lo que es peor, en este caso, para seguir ahondando el problema de...
a) el cupo vasco, y el famoso ‘régimen foral’, que ya está bien, a ver quien tiene huevos para quitarlo de una vez… que los españoles somos iguales ante la Ley.
b) el famoso ‘Referendum’ de independencia.
c) Y, lo que es peor, la famosa ‘España Federal y asimétrica’ que tanto gusta a los independentistas, que así pueden ser independientes… pero bajo el paraguas del ‘Estado Plurinacional Español’. O sea, que les paguemos la cena y el taxi que, caramba, parece ser que (por ejemplo) las pensiones vascas, que son de las más altas… están ayudando a pagarlas los cotizantes de Madrid, Baleares y Ceuta y Melilla, porque con las cotizaciones de los trabajadores vascos no se cubren. Hala, que se independicen ‘del todo’...

Pero bueno, mejor me callo, porque con las pensiones de Asturias, Patria querida… pasa lo mismo.

El caso es que, lo dicho… que tras las elecciones vascas todo va a seguir igual… hasta que salte el petardazo. La siguiente etapa, dentro de tres semanas, será la de las elecciones catalanas. Sospecho que se seguirá tensionando el ambiente, la derecha seguirá ‘pastueña’… y Sánchez seguirá flotando como el famoso patito del baño.
Así que ‘to be continued...’


PS: de mi ‘porra’ del otro día… mejor no hablar. Bueno, acerté el ganador (aunque el PNV ganó por menos) y acerté los resultados de ‘la derecha nacional’… pero me equivoqué claramente con el PSOE, y su cesión de votos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario