H
ace muchos (pero muchos…) años, se cuenta de la revista satírica ‘La Codorniz’ (1941-1978) que publicó un titular que decía: “Reina en España
un fresco general procedente de Galicia…”. Bueno, sospecho que se trata de una leyenda urbana, de las muchas que surgían en relación a esta
famosísima publicación semanal que, durante el franquismo, estaba en todas las casas de gente ‘intelectual no adicta al régimen’ (yo siempre
la recuerdo por ojearla en casa de mi abuelo)… e incluso en la de muchos adictos, basta decir que la fundó Miguel Mihura, la dirigió Alvaro de la Iglesia y pasaron por ella todas las mejores plumas y los mejores dibujantes de sus épocas.
Parangonando aquella famosa frase, y volviendo a los tiempos presentes, esta semana bien podríamos decir que “Una suave y estimulante brisa, procedente de Galicia, está atravesando España…” si nos atenemos a los resultados de las elecciones autonómicas gallegas del 18 de febrero.
Voy a poner solo los resultados (provisionales) generales, y compararlos con los anteriores, de hace 4 años:
Faltaría incluir ‘el voto exterior’, que aunque hay cerca de medio millón de gallegos en el extranjero, parece ser que solo suelen votar del orden el 7%, y no creo que influya mucho, porque solo hay en juego un escaño, en Orense, por poco más de una centena de votos, entre PSOE y PP.
Y las primeras conclusiones son, aparte de que aumentó la participación, que la derecha mantiene su electorado (y ya son cinco legislaturas sin apearse de la mayoría absoluta), mientras que la izquierda (esto es, el ‘bloque frankenstein’ del sanchismo) ha sufrido un gran terremoto porque aunque (¡Y esto es un importante tema a considerar…!) mantiene su electorado y debe quedar claro que los gallegos siguen votando, prácticamente fifty-fifty, al bloque de derechas (PP y VOX) y al bloque de izquierdas, hay patentes descalabros en los partidos ‘nacionales’ de izquierda… que son los que nos gobiernan.
Y así, el PSOE de Pedro Sánchez (él mismo, y el otro ‘figura’, el expresidente ZP, se volcaron expresamente en estas elecciones) cosecharon el peor resultado histórico, bajando de su suelo de 14 diputados (en toda Galicia) a solo 9, cuando el PSOE llegó hasta a gobernar, y a obtener, hace unos años, 22, 25 y hasta 28 escaños. Y esto solo tiene una razón: que los gallegos perciben que Pedro Sánchez lo está haciendo muy mal, pero no solo en Galicia, sino también, y particularmente ahora, en España. Y se le castiga.
Pero es que, además, a sus otros socios de gobierno, los podemitas y, ahora, la ínclita 'Yo-Yolanda' y su colectivo Sumar, nuestros sabios primos hermanos, los gallegos, les han dado otra soberana patada en el culo… porque al parecer también les consideran un peligro público. Y eso, a pesar de las ínfulas de la (además, gallega) vicepresidenta Yoli Díaz. Y no hay más que ver los resultados de Podemos, hace cuatro años, y los que obtuvieron ahora, tras escindirse del emergente Sumar...
¡Ay, Yolanda, ‘nuestra’ Fashionaria… que ya se te ve el plumero y la gente está harta de tus demagogias…! Y vosotros, podemitas supervivientes… ¿Donde están vuestras masas de votantes feministas, y de género…? ¿Y vuestra Angela Rodriguez Pam… que, por cierto, es de Pontevedra…?
Pero el caso es que como decía, parece que el bloque ‘de izquierdas’ se mantiene, porque los votos han ido a parar al BNG (Bloque Nacionalista Gallego)… quizás porque, aún siendo claramente secesionista, y radical, decidió ‘templar’ su discurso, evitar ‘escupir contra el viento’ (en otros términos, ‘mear fuera del tiesto’) y, envuelto en una piel de cordero, recoger los votos de socialistas y podemitas-sumaritas desencantados.
No me preocupa mucho, Galicia está muy aislada, necesitan a España y, seamos claros, en las últimas elecciones generales (de 2023) el BNG solo sacó 1 diputado (a las Cortes Españolas), y el 9,57% de los votos de los gallegos. Así que ese más del 30% actual es ficticio.
Pero lo que si me preocupa es la derecha: que, en primer lugar, tiene que esforzarse en romper, de una vez, ese ‘perfecto bipartidismo’ (bloque de derechas y de izquierdas, prácticamente al 50%) que tenemos en España. Y tienen que romperlo con el relato, dejándose de complejines y de jugar a ser progretas y todas estas historias de siempre… y además entendiendo que en España hay votantes de centro-derecha, y votantes de derecha-derecha… todos absolutamente respetables. Y hermanos. Que se den cuenta de que, claramente, hay mucha más ‘hermandad’ en la izquierda que en la derecha.
Me ha cabreado mucho que, otra vez, en estas elecciones, el PP pretenda ‘patrimonializar’ el voto conservador, atacando a VOX (y, como consecuencia, VOX ataca al PP), negándoles participar en debates televisados (y es el PP quien gobierna en Galicia, y en su TV), recomendando públicamente no votar a VOX porque es ‘dar votos a la izquierda’, favoreciendo el ‘cordón sanitario’ y la exclusión de VOX del sistema democrático (pero admitiendo a otros…), tratándoles, en suma, como enemigo directo… aparte, por supuesto, de mantener en Galicia un ‘corte’ del 5% de los votos provinciales para poder entrar en el parlamento gallego… lo cual es realmente abusivo.
Y esto es un error, es ‘cainismo’ puro y duro, y así nunca iremos a ninguna parte, salvo al tradicional modelo de las ‘dos españas’
En fin, no sigo, que tampoco me gusta mucho la actual trayectoria de VOX, así que acabo mi ‘vuelapluma’, que ya habrá tiempo de nuevas lucubraciones.
Entretanto, lo dicho, estos 'airiños, aires...' que nos han llegado de Galicia creo que dan margen a pensar que el fenómeno Pedro Sánchez, y su 'cesarismo', por muy resiliente que sea, se debería acabar pronto… para bien de España.
Así que, señores del PSOE, id pensando en que de eso de “oliñas veñen, oliñas veñen/ oliñas veñen e van/ non te vaias rianxeira/ que te vas a marear”… 'rien de rien'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario