O ‘encore une foi’, por ponerme más cursi… Y es que ya en diciembre de 2019 lucubraba (‘elucubraba’) yo, sobre la ‘Teoría del Mestizaje’, una magnífica idea que viene a decir que la mezcla de conceptos produce, muy a menudo, resultados más ‘enjundiosos’ que el optar solamente por uno de ellos ‘en estado puro’. Algo así como el tomar chocolate con churros o (ya lo comentaba entonces) como lo de mezclar la ginebra con una tónica schweppes.
Así que, en mi vida, esto de la Teoría del Mestizaje casi lo he considerado un axioma vital de subsistencia. Del estilo de lo del ‘aurea mediocritas’, aquel famoso ‘dorado término medio’ que ya loaba el poeta Horacio (no confundir con Horatio… el de la serie CSI Miami).
Y, por ello, algunos ejemplos de esta conducta 'proclive al mestizaje' marcan mi pensamiento personal. Así, ya mencionaba en la antes señalada ‘entrada del blog’ que en política considero que nadie es perfecto, de ahí mi rechazo a ser ‘visceralmente partidario’ de cualquier ideología… porque, visto desde el frío discernimiento, seguro que todos tienen algunas cosas buenas, que es enriquecedor apreciar… y malas, que por supuesto se deben condenar (y no ‘mirar para otro lado’ si son de ‘congéneres’)
Otro tanto podría decir refiriéndome al deporte, ya comenté en más de una ocasión que, siendo partidario del Real Madrid y del Oviedo, no soy forofo, y por eso soy crítico cuando lo hacen mal (y en el caso de Vinicius… me tiene muy harto su pésimo toque del balón para pasar o chutar). E incluso ‘no se me caen los anillos’ por aplaudir las cosas buenas que ‘pudieran hacer’ el Barça o el Sporting.
Y ya expresé aquí mis ‘felices’ ideas sobre las reglas del fútbol, como la creación de los ‘medios penalties’, las normas para señalar ’mano’, los fueras de juego…
Y sigo con ejemplos. También es mía la frase de que es más gratificante ser copulativo (esto es, poder elegir A ‘y’ B) que ser disyuntivo (elegir ‘o’ A, ‘o’ B).
El ‘mestizaje’, además, viene muy a menudo acompañado de la adopción de alguna solución imaginativa, lo cual es muy lógico, ‘la convivencia’ de teorías encontradas (‘antagónicas’) que hay que mezclar hace agudizar el ingenio para ‘casar intereses’.
Al grano: ahora está en candelero lo de la Ley del aborto, se acaba de rechazar, por el nuevo Tribunal Constitucional, ‘progresista’, el recurso de inconstitucionalidad de la Ley de Plazos de ZP… y ahora ya, en España, se puede abortar libremente hasta la semana 14… y por prescripción facultativa hasta con un embarazo de 5,5 meses.
Y eso lo ha aceptado expresamente Feijoó, y su PP, que parece que consideran que la sociedad española tiene que avanzar en el ‘progresismo’.
Pero, entonces, me pregunto… ¿Es que el ‘socialismo progresista’ es mejor, y va 10 años por delante del PP? ¿O es que estamos, simplemente, ante una maniobra electoralista… y lo que busca el PP, en estos momentos, es recoger votos ‘a su izquierda’ (de la ‘socialdemocracia’)?.
Porque esta maniobra pienso yo que es muy arriesgada, hay mucha gente ‘a su derecha’ cuyo sentimiento de que el corazón del nasciturus late desde los primeros días les hace identificar el aborto como un asesinato (y, desde luego, que piensa que, según las teorías de la izquierda progreta, el ser humano está menos ‘protegido’ que un animal… o un árbol) y pueden decantarse por Vox.
Pero me estoy desviando. Volvamos a la Teoría del Mestizaje… y voy a a especular, basado en ella, con una solución al problema del aborto (o ‘interrupción voluntaria del embarazo’, para ser ‘políticamente correcto’).
Aceptemos estas tres premisas:
La primera, que, por circunstancias muy variopintas, hay bastantes embarazos no deseados… y que, además, se está tendiendo a despenalizar completamente el aborto.
Una segunda, que el aborto, aparte de matar a un ser ya vivo, créase de entrada, o no, es bastante habitual que produzca un trauma psicológico, a veces muy profundo, a las propias jóvenes abortistas.
Y la tercera, que en nuestra civilización ‘occidental’ hay una crisis de natalidad, faltan jóvenes, la sociedad está envejeciendo, y su tendencia es a desaparecer.
Y apliquemos el mestizaje: ¿No estamos, en estos tiempos, ante un gran 'boom tecnológico'? Pues dediquémonos (si no se ha hecho ya) a inventar un ‘útero externo’, capaz de dar viabilidad a un feto. ¿No se ha hecho grandes avances con la fecundación in vitro y todo eso?
Pues muy sencillo: madre no vocacional, no mates a tu nasciturus, renuncia a él… pero dónalo a la ‘sociedad’. Y que la Sociedad se encargue de su viabilidad. Vamos, lo que se hizo toda la vida en las Inclusas, con los ‘niños expósitos’… y que parece ser que ahora, entre la crisis vocacional, y la cantidad de abortos que se producen, ni se oye hablar de ellas… ni dan abasto.
Así que anotemos eso de crear, tecnológicamente, un perfecto 'útero externo'... que la Sociedad podrá (y deberá) resolver (’técnica y/o humanamente’) el 'parto', y el desarrollo y su posterior integración en el mundo de la criatura 'rescatada del aborto'. Y no creo yo que sea demasiado difícil encontrar soluciones ‘imaginativas’ para ésto.
Y con ello habremos resuelto los problemas: el de las madres involuntarias y el de la crisis demográfica en las sociedades caducas… sin el trauma de quitar la vida a un feto viable… dejando además la 'mochila' psicológica consecuente.
Viva el Mestizaje...
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