Que la economia española está pasando por un pésimo momento es algo fuera de toda duda. España está en una crisis galopante, producto, claro está, de la pandemia del coronavirus… y de los malos políticos que nos gobiernan, por mencionarlos como elementos ‘primigenios’ sin apetecerme ahondar más. Pero se oyen voces interesadas diciendo que hemos crecido un 5% (pero no que bajamos, el año anterior, más de un 12%), que el paro disminuye significativamente, y aumenta el número de cotizantes, que todo va muy bien… y se te plantean dudas: ¿Será verdad que estamos remontando…?
Porque yo veo que, en mi ciudad, el consumo está por los suelos, las tiendas (hasta los supermercados) y los bares están semivacíos, la gente se retira a su casa a las 8 de la tarde… y esto es síntoma de ‘economia de subsistencia’, todo ello abonado, también, por un IPC desbocado, que acabó el 2021 con una escalada de precios hasta el 6,5%, y no digamos nada de la luz y el gas (cerca del 300%) y la gasolina (cerca del 30%)… cuando los salarios apenas suben un 2-3%.
Así que mi impresión personal es que algo se oculta. Que hay algo de 'gato encerrado', vamos...
Me puse a jugar un poco con los números y, de varias fuentes, como la Encuesta sobre Población Activa, o el propio INE, llegué a ajustarlos, bastante exactamente, en el siguiente cuadro, que paso a comentar:
Hombre, en primer lugar, hagamos un acto de fe (aunque a nadie extrañaría que se falsificasen (o ‘cocinasen’) las cifras, véase las encuestas del CIS de Tezanos…) pero, dicho esto, añadiendo que no soy, ni pretendo, ser experto demógrafo… se observa, en primera instancia, evoluciones significativas, dentro de este cuadro, que aclaran cosas. Y se aprecian muy bien guiándonos por los porcentajes.
Empezando por la población, en general, vaya, estamos creciendo… pero claramente no es por los índices de natalidad, sino por los emigrantes. Y, en consecuencia, somos una población que cada vez más vieja, ya que baja sensiblemente el porcentaje de menores de 16 años. Así que no hay pirámide de edad… sino ‘campana de edad’. Y, además, aumentan los ‘mayores inactivos’. Vamos, que hay más jubiletas, y sufrirán las pensiones futuras, porque cada vez habrá menos cotizantes por jubilado…
Un punto desgraciadamente significativo es el ver que aproximadamente un tercio de la población ‘sostiene’, con su productividad, a todos los españoles. A ver, no hay más que sumar, como no productivos, los menores de 16 años, los mayores inactivos, los parados… y los que están a sueldo del Estado (esto es, de todos los que viven del PIB y de los impuestos generados y recaudados de los reales 'entes productivos')
También debe señalarse la disminución del % de parados. Como dije, espero que no sea un dato ‘cocinado’... De hecho, ya se han hablado más de una vez de las ‘entresacas’ a la población de parados (en ERTE, sin demanda activa…). Dejémoslo estar y alegrémonos de que, según la estadistica oficial, va bajando el desempleo.
Pero analicenos en profundidad este dato. Porque resulta que la creación de empleo de este Gobierno actual de presidente Pedro Sánchez (que lo es desde junio de 2018) se basa, prácticamente, en el aumento del empleo público. O sea, de la población ocupada… a sueldo del Estado. No hay más que verlo, de 2019 a 2021 el número total de ocupados ha crecido en unas 218.000 personas… y el número de personas ‘a sueldo del Estado’ ha aumentado en 222.000.
En resumen, estamos en este círculo pernicioso: las empresas cierran, o reducen personal. Y, para que no aumente el paro, les contrata ‘papá Estado’. Pero claro papá Estado no produce, y sus únicos ingresos son las tasas y los impuestos que recauda de las empresas, y de sus asalariados, y de los autónomos.
Y añadamos a eso el más famoso vicio de los políticos (y yo añadiría que, muy especialmente, de ‘los de izquierda’: el despilfarro… y ‘el cazo’.
La conclusion, muy simple: menor productividad y mayor gasto. Y ahora, apliquemos la política predilecta (o única) de los gobernantes mediocres: ¿Reducir gastos superfluos…? NO. ¿Hacer, incluso, unos ‘Presupuestos Cero’ para ajustar el gasto…? TAMPOCO.
Porque la receta de un políticucho en el gobierno es mucho más simple: lo único que hay que hacer es... una ‘patada a seguir’. Y subir los impuestos, aumentar el déficil… e incluso hacerlo exageradamente, que los cabreos de la gente ‘esquilmada’ se suavizan aumentando el gasto público con obras o medidas populistas, con un buen 'unte' a los medios audivisuales afines, con la compra estratégica de votos, cuando se necesite, con subvencionar o paniaguar al personal para incrementar los 'votos cautivos'… y punto. O sea, que 'el que venga detrás, que arree'.
Y me temo que en esas estamos...
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