Feliz Navidad 2021

Un año más, por estas fechas, me gusta brindar una entrada al famoso ‘amigo invisible’ y, como en los viejos ‘Christmas’, dedicar unas líneas a desear paz y prosperidad para todos (bueno, para ‘los hombres (y las mujeres) de buena voluntad’), añadir alguna imagen ‘significativa’ y, básicamente, a mencionar algo sobre año que acaba… y sobre el que va a empezar. O sea, como el ‘Mensaje de Navidad’. Así que me pongo a ello…

Y lo primero que me viene a la mente es la reciente tentativa de la ínclita Presidente (¿o Presidenta…?) de la Comisión Europea, doña Ursula Gertrud von der Leyen que, en sus ‘Directrices para la comunicación inclusiva’ recomendaba (en pretérito imperfecto, que creo que ya lo han retirado) que no se felicitase ‘la Navidad’ sino ‘las Fiestas’, «para evitar considerar que se era cristiano y abrirse más a la integración multicultural»

¡Toma nísperos…! Pero me encantó la inmediata reacción de nuestro diputado Iván Espinosa de los Monteros, que envió, en cuanto se hizo publica la noticia, un ‘guasap’ con este texto:
Hola @vonderley
¡Feliz Navidad! - Frohe Weihnachten! - Merry Christmas! - Joyeux Noël! - Feliz Natal! - Buon Natale!

Ole ahí… este es un chico que me gusta mucho: un político universitario, educado, culto… Vamos, que se ve que procede de varias ‘generaciones de bañera’ (su padre es el actual marqués de Valtierra).

Pero volvamos al mundo mundial. En estos momentos toda Europa está atenazada bajo la influencia de una sexta ola de la pandemia. Aquí… vamos camino de ello. Y me vienen a la mente negros pensamientos: un Papa ¿Papa Negro… ya que es jesuita? que, según San Malaquías, debería ser el último, grandes pandemias, un anticristo que bien podría todo eso del ‘Great Reset’, la Agenda 50, las ideologías de género… y una olla geo-política a plena presión que, como estalle… entramos de lleno en el bíblico Armagedon... ¿O no…?

En fin, que a ver qué nos depara el 2022. Al 22 en el bingo siempre se le llamó 'los dos patitos'… Así que suerte (y salud) para todos…

Y, como siempre, remato con la imagen. Bueno, este año van a ser dos. La primera es algo así como un ‘Encuentra a Wally... con mascarilla’ porque, cuando, claramente, todos deberíamos ser ese Wally...

(Por cierto, hay del orden de un 2,5% de 'Wallys con mascarilla correctamente colocada'. En este aspecto deberíamos estar más tranquilos, es bastante más que la cantidad de justos que dicen que había en Sodoma y Gomorra…)

Y la segunda imagen también tiene que ver con las mascarillas… y con el gran negocio que podrían hacer los cirujanos de estética que se dediquen a la otoplastia… a poco que bajen los precios…
Y que aprovecharé para despedirme. Así que...

Y a por un 2022… en concordia… y sin mascarillas