Siempre me ha gustado consultar diccionarios. Y no solo los uso para resolver dudas puntuales sino que los utilizo con frecuencia con el simple objetivo de conocer y aprender cosas. De ahi mi afición a usar a menudo el DRAE (que define, en general con gran perfección, el
significado exacto (‘académico’) de cada palabra) y el Dicionario Etimológico (como el de Corominas) para identificar la raiz, u origen de
los vocablos. O el de sinónimos y antónimos, que tanto puede ayudar a enriquecer la redacción de un texto...
O el de Incorrecciones, Neologismos, Barbarismos y Abreviaturas de la Lengua Española. Pero no solo existen estos diccionarios, hay también muchos otros diccionarios realmente curiosos, interesantes, o divertidos. Por poner ejemplos, el famoso Diccionario Secreto de Camilo J. de Cela, o un curioso libro, el 'Diccionario de Palabras Moribundas', de Grijelmo y García Bouton o, sin ir más lejos, el divertido ‘diccionario swahili-español’ del que ya hablé aquí (pan… bimbo, marisco… gamba, himno… chunda… y se podría seguir con soldado... rambo, y con mango, tanga, cuantagua, gallumbo… etc, etc)
Hoy voy a hablar aquí de uno más, también divertidísimo, que se publicó en los años 70 del siglo pasado: el Diccionario de Coll.
Jose Luis Coll fué un inteligente (y culto) humorista, en realidad actor y escritor, que falleció hace algún tiempo, y que en esos años 70, y siguientes, fue muy famoso (él, en sus apariciones por radio y TV… y su diccionario, del que se publicaron, al parecer, 29 ediciones).
Por no enrollarme más, bastará copiar y pegar unos ejemplos de definiciones, para mostrar la finura de su humor…
ABORTAJE parto antes de tiempo en las mujeres piratas.
ASESENO Que agarra fuertemente el seno, hasta darle muerte.
AUSCULTOR Artista que modela o talla, y a la vez explora los sonidos en el pecho de la figura por él creada.
BANDEDO Bandolero perverso que, no contento con saquear a una víctima, la señala con el índice.
BANDERILLA Estandarte que usan los enanos en sus guerras.
BASTILLA Píldora que tomaban las francesas hacia 1.789, para no tener hijos con la nobleza.
CACAFONÍA ventosidad, pedo.
CAINMÁN El primer saurio que mató a su hermano.
CARCELIRIO Guardián de prisión que despierta a los reclusos rozándoles las nalgas con flores liliáceas.
CIENICIENTO Doscientos, pero pobres, desgraciados, y sin suerte en la vida.
COÑÓN Pieza de artillería que no cesa de hacer bromas mientras dispara.
CORSARITO Pirata marica.
CHARLATÍN Persona que habla incesantemente en la lengua que usaban los antiguos romanos.
CHISTELARI Tocador de flauta en el País Vasco que, en sus descansos, cuenta chascarrillos.
CHIVASTO Delator enorme, de grandes dimensiones.
CHURROGUERESCO Frito hecho con masa de harina, pero excesivamente recargado de puntillas.
EDIVICIO Cualquier obra arquitectónica bajo cuya techumbre se organicen orgías o bacanales.
ENCHULADA Torta de maíz aderezada con chulería.
EPOPEYE Poema heroico, extenso y de elevado estilo, dedicado a un famoso personaje de dibujos infantiles.
ESCURREPILATOS Utensilio que usó el famoso gobernador romano cuando se lavó las manos para no dar la cara.
ESTÓRIL Dícese del macho vacuno que ya no es capaz de engendrar.
EXTREMAÑO Natural de Cáceres nacido en Zaragoza.
FANTAASMA Espectro que se manifiesta a través de una respiración fatigosa.
FIRIFI Hincha acérrimo de un equipo de fútbol, un poquito mariquita.
GOHETE Escritor alemán que, unido a una varilla ligera, se eleva en el aire al darle fuego.
HARPONERO Uno de los hermanos Marx, aficionado a la pesca de la ballena.
LADRILLO voz del perro de un albañil.
LATÓN Roedor chino, compuesto de cobre y zinc.
LESIÓN dícese, en Andalucía, a lo que explica un maestro a sus discípulos, para que lo estudien.
MEMOTECNIA procedimiento de asociación mental para recordar las veces que uno ha hecho el tonto.
METROPURITANO Ferrocarril subterráneo en el que sólo viajan los individuos de principios muy rectos y severos.
MORIBURDO Que se está muriendo, pero de manera tosca y basta.
MOSCOBEATA Natural de Moscú que frecuenta mucho los templos.
NINGÜINO especie de ave marina, no voladora, que vive en el polo Norte.
ODALISTA Esclava del harén, de agudo ingenio, que siempre conseguía ser la elegida.
OTETIS Inflamación de los senos que puede llegar a producir sordera.
PENÉLOPEZ Esposa de Ulises que, harta de tejer y de esperar a su esposo, acabó casándose con el hijo de un famoso fabricante de chocolate español.
PERLUZA Pez anacantino, de cuerpo casi cilíndrico y carne blanca nacarada, que se encuentra en el interior de las ostras.
PISTOLERDO Individuo del hampa poco hábil en el manejo de las armas.
PLEBELLO Dícese de quien, no siendo noble ni hidalgo, es guapo como un ramito de jacintos.
PUTANO hidrocarburo gaseoso que comercia con su cuerpo.
REMERA Puta con piragua.
RESPLANDECENTE Que brilla por su honradez.
TIGRIS Río donde se bañan los felinis.
TRAJODIA Pieza teatral en la que mueren todos los que se dedican al fornicio.
TRANCANIEVES Personaje de cuento infantil que tenía problemas con la bebida.
VERBORREA Enfermedad venérea producida por la elocuencia mal contenida.
VESPADACHÍN Dícese del que practica el arte de la esgrima a lomos de una scooter.
VULGARCITO Personaje de cuento infantil, sin la menor importancia ni detalle digno de ser destacado.
WALKIRIE invocación que se hacía al inicio en las antiguas misas escandinavas.
ZUECO Andaluz nacido en Suecia.
Evidentemente esto es una selección, que incluso contiene alguna ‘morcilla’ personal, así como algunos ‘arreglillos’ de texto… pero que ni se notan. El objetivo es claro: además del homenaje al autor de este diccionario, se trata de recordar el viejo slogan, tan positivo, que se inventó en San Sebastián, y que nunca debemos olvidar: aquel que decía, simplemente... ‘Sonría… por favor’
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