O sea que, como en la historia del famoso huevo de Colón, para poner un huevo de pie no hace falta ser un Brunelleschi... sino solo cascar un poco un extremo… y santas pascuas.
Y es que resulta que estaba en el Ambulatorio, esperando consulta con mi médico, y en ésto suena en todo el edificio un ruido fortísimo. Salió la enfermera a ver qué pasaba, habló con otra, la gente de las salas de espera molestísima con el ruido, y todo el mundo estaba algo alborotado, e incómodo, con el incesante pitido.
El caso es que a mi me llamó el médico, pasé consulta, estábamos charlando un rato… hasta que de pronto entró el médico del despacho de al lado y dijo:
- Oye, que tenemos que desalojar el edificio
Y nada, salimos tranquilamente, bajamos por las escaleras (mi consulta la tengo en un tercer piso) con más gente, salimos al exterior (por cierto, en las ventanillas de entrada todavía estaban despachando cosas…) y nada, nos despedimos y, para mi, ahí quedó la cosa.
Pero, reflexionando... parece claro que fue una alarma. ¿Falsa alarma, por haberse disparado sola? ¿Un ejercicio (simulacro) programado? ¿Un problema cierto (aviso de bomba, por ejemplo)…? Pues de momento no lo se. La próxima vez que vaya, por curiosidad, intentaré enterarme.
Y decía arriba que somos imbéciles porque la cosa fue poco seria, nadie hizo caso a la alarma, y ahí seguimos todos, en ese edificio público, durante más de 15 minutos, hasta que alguien fue diciendo que, al parecer, había que ir abandonando el local.
Lo que me lleva al inicio de esta entrada del Blog. Que nos hacen imbéciles, cuando la cosa es mucho más sencilla…
Porque, vamos a ver, si en vez de un ruido más o menos estridente, que nadie sabía lo que era ya que los avisos acústicos de alarma no están ‘normalizados’, y por lo tanto el personal no tiene fijado su ‘automatismo de defensa’…
¿No es mucho más sencillo que en vez de soltar un pitido, que hay que interpretar, las alarmas emitan, por los altavoces, mensajes como
‘Atención, atención, esto es una Alarma… por favor, abandonen ordenadamente el edificio’
y que todo el mundo se entere, a la primera, de lo que hay que hacer…?
De cajón ¿no?
Así que, como moraleja, nunca debemos olvidar aquella vieja canción infantil (¿o de una zarzuela, o de una revista musical...?) que decía…
“Colón fue un hombre de gran renombre
que descubrió un mundo nuevo
y que además, fue el primer hombre
que puso un huevo...
... de pie”
que descubrió un mundo nuevo
y que además, fue el primer hombre
que puso un huevo...
... de pie”
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